La manifestación se centró en la crítica a la actual situación del sistema de salud, el cual, según los asistentes, obliga a la población a recurrir a la solidaridad, ejemplificada en las populares “polladas”, para cubrir gastos médicos esenciales.
El acto de protesta se caracterizó por la inauguración de un inusual “monumento al pollo”. Este símbolo, según los manifestantes, representa la realidad de que las “polladas” terminan salvando más vidas que el propio Estado paraguayo.
Lilian Acosta, de Telefuturo - Prensa, cubrió el evento y señaló la contundencia de esta forma de protesta. Los representantes de las diversas organizaciones presentes enfatizaron que si bien la solidaridad a través de iniciativas como las “polladas” es una realidad cotidiana, no puede ni debe suplir la obligación fundamental del Estado de garantizar la salud de sus ciudadanos.
Exigieron que se aumente el presupuesto destinado a salud, que actualmente no alcanza el 3% del Producto Interno Bruto (PIB), considerándolo uno de los más bajos de Latinoamérica. La demanda es que este porcentaje se eleve al menos al 6%.
Una de las representantes que tomó la palabra durante la protesta señaló que el monumento busca reclamar la atención pública ante muertes infantiles, de mujeres y de personas con cáncer que calificaron como prematuras, innecesarias y prevenibles.
Afirmaron que como pueblo recurren a la solidaridad, pero insistieron en que la responsabilidad de atender las necesidades de la gente en materia de salud recae en el Estado, no como una dádiva, sino como un derecho adquirido a través de los impuestos que aportan los ciudadanos. Además, hicieron hincapié en la necesidad de que los recursos destinados a la salud sean utilizados de manera eficiente y honesta.