El incidente ocurrió el 14 de abril alrededor de las 6:30 de la mañana, según se observa en las imágenes de cámaras de seguridad expuestas por el hermano de la víctima.
De acuerdo con el relato, dos hombres ingresaron a la propiedad tras abrir el portón. Uno de los individuos llevaba puesto un guante, lo que sugiere una posible planificación para no dejar rastros.
Los delincuentes pasaron varios minutos intentando abrir el portón antes de dirigirse al lugar donde estaba estacionado el automóvil y llevárselo.Posterior al robo, la familia recibió una llamada de una persona que afirmaba conocer la ubicación del vehículo y solicitaba una suma importante de dinero para su devolución.
La familia expresó su desconfianza ante esta comunicación, sin poder determinar si los interlocutores estaban involucrados en el robo o si eran personas que intentaban aprovecharse de la situación.