05 may. 2025

Habló el papá de Ismael, adolescente que murió en un partido de fútbol

Con mucho dolor, el papá del chico de 15 años que murió tras una pelea durante un partido de fútbol recordó cómo era su hijo, pidió que se encuentre al culpable y se haga justicia. Dijo que el adolescente era un estudiante ejemplar y que amaba el fútbol.

Screenshot_7.png

En contacto con Telefuturo, don Isidro Domínguez comentó cómo fueron las últimas horas con su hijo antes de que ocurriera la tragedia. Recordó al adolescente como alguien muy aplicado y dedicado al deporte.

“Estaba muy enamorado del fútbol, también desde el primer grado era el mejor alumno y abanderado de cada año. Teníamos mucha esperanza en él. Ese día yo le di dos bendiciones, parece que presentía algo y pasó lo que pasó", expresó entre lágrimas.

La gresca se registró al término del encuentro deportivo entre jugadores del club Boquerón del barrio San Pablo y Nacional de San Bernardino, en horas de la tarde del sábado. El joven habría recibido primeramente una patada en la espalda, posteriormente fue golpeado continuamente estando ya en el suelo.

El menor fue auxiliado rápidamente hasta el hospital San Pablo y luego por la gravedad del caso, lo llevaron al hospital del Trauma, donde falleció horas después. Los profesionales indicaron que recibió patadas en la cabeza y murió por traumatismo de cráneo encefálico.

El menor se había integrado al equipo hace sólo una semana con gran esperanza de ser un gran jugador, pero lamentablemente todo se truncó.

VER MÁS:
Un episodio de violencia se desató en la avenida Manuel Ortiz Guerrero, que conecta las ciudades de Ñemby y San Lorenzo, cerca de las 10:20 de la mañana. El incidente involucró a dos colectivos de transporte público, específicamente de la Línea 26 y la Línea 2.
Hoy se ha instalado formalmente la Comisión Especial Investigadora de la Mafia de los Pagarés, en la Cámara de Senadores. Esta comisión, integrada por 12 senadores, tiene como objetivos principales investigar esta mafia y buscar formas de resarcir a las víctimas afectadas.
Un grupo de docentes utiliza una precaria balsa para cruzar el río Aquidabán e ir a una escuela indígena a impartir clases. Los mismos deben enfrentarse a todo tipo de precariedades para llegar junto a los niños, mientras las autoridades hacen ''la vista gorda’’.