31 de marzo de 2016
Estudiantes secundarios compraron alimentos con "precios reales" y lo entregaron al Ministerio de Educación y Cultura. También le regalaron una calculadora a Marta Lafuente para que "calcule los precios".
Los estudiantes protestaron contra el ente por la adjudicación millonaria de botellas de agua de medio litro a G. 10.000 la unidad; chipitas a G. 80.000 el kilo, y cocido negro a G. 80.000, entre otros.
Ayer en conferencia de prensa, Lafuente dijo que se cancelaba la adjudicación y que era el precio de un hotel 5 Estrellas, justificando la contratación.