La investigación encuestó a más de 400 parejas en dos ocasiones, con un año de diferencia entre cada encuesta, y los resultados mostraron que mientras más selfies se sacaban el primer año, peor era su percepción de calidad de pareja durante el segundo.

En conversación con Podría ser peor, Daniel Halpern, académico de la Facultad de Comunicaciones de la Universidad Católica, indicó que la relación entre selfie y la percepción de calidad de pareja es negativa al no enfocarse en el otro.

El caso de las selfies para el investigador es “el icono de una cultura muy individualista donde la persona con tal de mostrar una imagen propia, de proyectarse frente a los demás, elige el ángulo, la posición y la distancia para verse mejor”, señaló.

Y agregó que mientras mayor es la cantidad de selfies que las personas se sacan, menor es la percepción de calidad que se tiene de pareja.

Añadió que cuando una persona de esta relación se saca selfies constantemente, nacen los celos, las peleas y los conflictos.

Asimismo, señaló que en las selfies se trata de mostrar la mejor cara e imagen, es decir, lucir lo mejor posible. “La gente que pone más selfies son quienes reciben mayores comentarios. Hay una relación entre cantidad de material que uno pone en las redes sociales y material que se recibe con likes”, dijo.

“Cada vez nos cuesta más mantener relaciones concretas, más cercanas que requieren más compromiso. Una pareja es un compromiso tremendo el que se tiene, y obviamente hay una molestia cuando uno de los dos siente que la otra persona está comunicando todo por fuera y siente que en vez de enfocarse en la relación, ventila la relación”, concluyó.

Fuente: biobiochile.cl