Según la denuncia, Rosmary Morales embarazada de 8 meses ingresó a las 16hs del 30 de agosto pasado al sanatorio Adventista debido a un malestar general. Su esposo, dijo que le recetaron un antiespasmódico y la enviaron a su casa. Pero reingresó al hospital a las 22 horas y las 4 de la mañana del día siguiente dio a luz, pero su bebé falleció. Y ella fue derivada a Terapia Intensiva donde permaneció hasta el pasado 28 de setiembre.

En la denuncia figura que la mujer sufria de Preeclampsia, una enfermedad hipertensiva propia del embarazo, que aparentemente terminó matandola. 

Los familiares indicaron al médico tratantede haber omitido información sobre su condición de salud.