En una vivienda ubicada entre las calles Oliva, entre Montevideo y Ayolas se produjo el hallazgo de cadáveres en condición de putrefacción. Uno de los primeros cuerpos identificados fue la  Dalma Rojas Rodas, una boxeadora de 23 años, quien residía en el lugar, según testigos, junto con sus dos hijos y su madre.

El médico forense de la Fiscalía, Pablo Lemir, adelantó que se trataría de muertes por violencia, debido a las condiciones en que fueron encontrados los  cuerpos declaró que "nadie hace eso con una muerte natural". Además destaca la utilización de elementos que aceleran la putrefacción de los cuerpos, como es la cal hidratada.

Detuvieron a Bruno Javier Maravel de 19 años, quien era pareja de Dalma Rojas, la única víctima identificada hasta el momento. Según reportes de la policía, el joven tomó un taxi para ir con su actual pareja con quien pretendía escapar hacia la República Argentina. Tras persecución y balacera fue detenido en Remansito. 

Informaciones desarrolladas posteriormente, complementan que según declaraciones del detenido, Bruno Marabel, el mismo perpetró todos los hechos de asesinato hacia las personas y que el mismo se encargó de esconder, enterrar los cuerpos. Aclara que lo hizo sin la complicidad de nadie, declaraciones que también fueron puestas en duda por los investigadores.