PACTO DE IMPUNIDAD

14 de noviembre de 2018

Es más fácil destituir a un presidente de la República que desprender de su investidura a un legislador.

Compartir

La cámara de la vergüenza o la Cámara de Diputados concretó ayer un pacto de impunidad. En esta cámara una gran cantidad de legisladores se encuentran imputados, no solamente Carlos Portillos, lo podemos resumir en el bloque del PLRA, en el bloque de la ANR. Lo que hicieron fue complicar todavía mucho más lo que podría ser destituir a un presidente de la República que despojar a un legislador de su investidura. 

¿Qué se necesita para que un legislador pierda su investidura?

1- Se necesita mayoría absoluta de 41 diputados o 23 senadores.

2- La Fiscalía electoral debe tomar la decisión si acusa o no acusa al legislador cuyo proceso de pérdida de investidura está en trámite

3- Si hay mérito se eleva al tribunal de la capital 

4- Luego se puede apelar al Tribunal Superior de Justicia Electoral 

Convirtieron en Ley algo que debía ser un reglamento y con eso ya se daba curso con lo que dice la Constitución Nacional. 

El artículo 2 del proyecto establece que para pérdida de investidura por tráfico de influencias se requiere de la culminación del proceso penal. La culminación del proceso penal en nuestro país podría ser un trayecto interminable. 

Para que el diputado Portillo sea destituido deberá contar con una condena previa por esta vía de la pérdida de la investidura. La prescripción de la pérdida de investidura puede darse a los cinco años. Si en cinco años una resolución judicial no terminó finiquitando el proceso de tráfico de influencias declarando culpable a un legislador, la causa prescribe a los cinco años y nunca más va a poder ser tratada esta cuestión.

Otro dato importante, y curiosamente llamativo, si un legislador plantea la pérdida de investidura de otro colega puede ser sancionado por haber actuado de mala fe, es decir son intocables hasta entre ellos. 

Este trámite también se extiende a concejales municipales.

Compartir

Más notas: