Cada 40 segundos alguien pierde la vida a causa del suicidio, esto significa que cada año se pierden 800.000 vidas por esta causa. Cada pérdida es una tragedia indescriptible tanto para la persona, como para la familia, amigos, colegas. 

La juventud representa el futuro, y a pesar de eso el suicidio es la segunda causa de muerte entre las personas de 15 a 29 años, después de los accidentes de tránsito. Se deben intensificar los esfuerzos para que los jóvenes dispongan de los mecanismos de adaptación necesarios para enfrentarse a las dificultades que se le presentan, ya sea en la escuela, la universidad o en el trabajo.

También debemos velar para que tengan el apoyo que necesitan en el momento adecuado. El suicidio puede afectar a cualquier persona, en cualquier lugar. No es solo un problema de los países de ingresos altos, de hecho casi el 80% de los suicidios ocurren en países de ingresos bajos y medianos, donde escasean los recursos para detectar y apoyar a las personas que necesitan ayuda.Es categórico fortalecer la salud mental y los sistemas de atención. 

Por cada suicidio hay 20 intentos fallidos.Las personas que sobreviven a un primer intento, corren mayor riesgo de intentarlo de nuevo. Es importante prestarles el apoyo que necesitan, afortunadamente los suicidios se pueden prevenir. 

Las cuatro intervenciones esenciales para ayudar a prevenir el suicidio son: 

- Restringir los accesos a los medios de suicidio.

- Alentar a los medios de comunicación para que informen de manera responsable sobre el suicidio.

- Promover programas orientados a que los jóvenes en las escuelas adquieran aptitudes para enfrentarse a la vida.

- Identificar el riesgo de suicidio lo antes posible para ofrecer apoyo adecuado.

Todos tenemos un papel importante a la hora de prevenir el suicidio ya seas amigo/a, pareja, familiar, colega, todos podemos dar un mano al que necesita ayuda.

Fuente: who.int