Un enorme escándalo se desató en el  fútbol inglés, luego de que el diario 'The Times' destapara un caso de espionaje entre el Liverpool y Manchester City. Según señala dicho medio, los 'Reds' piratearon la base de datos de los 'ciudadanos' para hacerse con los nombres de los futuribles fichajes que seguían.

Los sucesos habrían ocurrido  entre junio de 2012 hasta febrero de 2013, y habría sido el hoy equipo de Guardiola el que se percató de los hechos y tuvo que contratar a un equipo especializado para investigar el caso.

La alerta saltó en el Etihad Stadium después de descubrir que su adversario mostraba interés por el fichaje de Paolo Fernandes -futbolista juvenil por aquel entonces del Zaragoza que acabó fichando por el City-.

Con el temor de una violación de la seguridad, el City llegó incluso a acelerar los fichajes de Jesús Navas y Fernandinho.

El Liverpool admitió su culpa y los clubes llegaron a un acuerdo económico para evitar que el escándalo tome dimensión pública. La confidencialidad se mantuvo hasta que The Times publicó los detalles de este conflicto de espionaje que deja mal parada a la Premier League inglesa.