Óscar González Daher, Raul Fernández Lippmann y Carmelo Caballero fueron declarados culpables del delito de tráfico de influencias en la causa conocida como los "audios del JEM", en la que estos formaban parte de un esquema de manipulación de jueces y fiscales gracias a su poder en el Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados.

Sin embargo, ninguno de los procesados pasará una sola noche tras las rejas, ya que el tribunal les otorgó el beneficio de la 'suspensión a prueba de la ejecución de la condena', con lo que gozan de libertad y solo deben cumplir con ciertas reglas de comportamiento.

González Daher y Fernández Lippmann fueron condenados a dos años de prisión y Caballero a un 1 con 8 meses de cárcel.

El Tribunal los declaró inocentes del cargo de asociación criminal y criticó duramente el trabajo de la fiscalía que a su criterio, no pudo comprobar este crimen.

Desde el Ministerio Público anunciaron que apelarán el fallo antes la leve pena impuesta a los acusados, ya que habían solicitado entre 6 años y medio y 4 años y medio de cárcel.