Uno de los sectores más golpeados por la pandemia fue el de las salas de cine, llevando incluso a empresas importantes en el munfo como la célebre "Cineworld Group", propietaria de "Regal Cinemas", poseedora de 127 salas en el Reino Unido, incluidos Picturehouse Cinemas, y 536 en Estados Unidos. En octubre de 2020 anunciaba que cerraban sus puertas llevando a 45 mil funcionarios al desempleo.

Paraguay no fue la excepción, las salas tuvieron que cerrar presentando un panorama muy negativo, algo notorio ya que entre el 2017 y 2019 la movia comercial fue positiva superando los 2 millones de tickets vendidos, pero en el 2020 todo fue al pozo. Para marzo de ese año ya se veía una caída del 53%.

La apertura bajo un estricto protocolo que incluye el uso de mascarillas y el límite en venta de tickets para mantener el distanciamiento en las salas fue una buena noticia para el gremio, pero los números todavía no dan el panorama positivo.

"Los cines están operando desde el 12 de noviembre más o menos", explica Hansel Biedermann, de la "Cámara de Exhibidores del Paraguay". "De los abiertos la mayoría está trabajando al 50 % o un poco más de salas. Un cine de 4 salas abren dos por ejemplo. Y están trabajando con personal y horarios reducidos. Algunos cines no abren los lunes, otros abren recién a las 4 de la tarde, cada cine tiene una particularidad diferente, todavía no están ni los horarios completos ni la capacidad completa", alega.

"En este momento el movimiento es extremadamente bajo, está a un 10, 15%. Si bien todas las semanas hay un aumento en cantidad de público, es muy lento todavía la recuperación. Y se debe a varios factores. Desde que abrimos en noviembre, tuvimos un estreno; un Blockbuster y dos estrenos grandes, el resto fueron estrenos medianos a pequeños".

"Los grandes estudios fueron posponiendo sus películas grandes. Y lo siguen haciendo, por lo tanto, se crea un escenario que si bien hay estrenos, a lo mejor no son lo suficientemente atractivos como para que la gente salga de su casa y asista una sala de cine".

"Es un momento delicado para la industria, tanto para exhibidores, distribuidores y todo lo que rodea. Se viene saliendo de un paro de 9 meses en los cuales los ingresos fueron nulos, fue todo egreso, sobre todo la parte de nómina, tené en cuenta que el tema de la suspensión de ips y todo eso fue por pocos meses, luego se tuvo que ir liquidando a todo el personal".

"Hay empresas que liquidaron al 100 % y ahora están recontratando y otras se quedaron con el personal  esencial pero básicamente la cantida de gente que trabaja en estas empresas perdieron su trabajo. Tanto las exhibidoras como distribuidoras en este momento se encuentran trabajando a pérdidas, estas condiciones de mercado hacen que los números estén en negro, lo que significa que se están tocando las reservas, se están tocando los montos que eran para inversiones o se están endeudando".

"Ahora, la mirada positiva es que las cosas sí están mejorando en el sentido que se ve un incremento todas las semanas, el tema es la velocidad, ése es el problema, no es suficiente todavía para alcanzar los números".