Videojuegos paraguayos continúan superando niveles y hacen historia

15 de diciembre de 2014

Creativos nacionales incursionan en el apasionante mundo de los videojuegos y ofrecen productos que nada tienen que envidiar a los grandes estudios. Malavisión y Escape Fast son dos de ellos.

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La industria mundial de los videojuegos es un mercado seductor, prolífico, que posee millones de adeptos detrás y que cada año tiene más demanda, puesto que ya dejó de ser un simple entretenimiento para los más pequeños. Hasta el momento, Paraguay ha contribuido con el universo gamer, principalmente, como un mero consumidor, pero eso ya está cambiando.

Ismael Pozzo (27) y Víctor Corvalán (27) son solo dos de los cientos de jóvenes programadores y desarrolladores de software que están introduciendo a Paraguay en una industria desconocida, desafiante, pero apasionante y, sobre todo, con mucho futuro.

Pozzo, oriundo de San Antonio, acaba de finalizar el desarrollo de Malavisión, juego del género de survival horror (terror), cuyo protagonista es un militar paraguayo que regresa del Chaco, con destino a Asunción, durante una noche de tormenta. En el trayecto, su vehículo choca inexplicablemente, por lo que deberá seguir el camino a pie. Pronto descubrirá que no está solo, cuando el espíritu de una atormentada mujer empiece a perseguirlo. El juego está disponible para PC y puede ser descargado gratuitamente. (Acceda al link de descarga)

El creador de Malavisión comentó que el juego no es muy largo, porque su objetivo era desarrollar un videojuego que reúna las más altas exigencias técnicas, de manera a demostrar que también es posible realizar un producto de esta naturaleza en Paraguay. De hecho, es el primer juego que desarrolla en su vida.

"Elegí la historia de Mala Visión porque ya tenía todas las herramientas para desarrollar el entorno, en un lugar despoblado. Como siempre es común meterle a los siete hijos malditos (de Tau y Kerana) o al Pombero, me decidí por Mala Visión, que me parece más terrorífica", indicó.

Pozzo estudia diseño gráfico en el Instituto Superior de Bellas Artes y se recibe el próximo año. Aseguró que su objetivo inmediato es crear un videojuego más grande.

Experiencia

 Víctor Corvalán desarrolla videojuegos desde los 14 años y cuenta con 20 creaciones. Actualmente, trabaja con la empresa nacional de desarrollo de software, Roshka, y juntos acaban de lanzar el juego Escape Fast para los dispositivos iPhone y iPad, de la gigante tecnológica Apple. Tiene un precio de dos dólares y ya puede ser descargado de la tienda.

Es un divertido videojuego en tres dimensiones (3D) de acción-conducción donde el jugador tendrá que esquivar obstáculos y huir de la Policía mientras conduce por difíciles caminos.

"En Escape Fast el jugador toma el papel de un ladrón que acaba de robar un banco y es engañado por su compañero. Su misión es alcanzarlo para recuperar su botín y a la vez evitar ser atrapado por la policía. Está cargado de humor, persecuciones y acción", señaló Pablo Santa Cruz, director de Roshka.

Explicó que contrataron a Corvalán por ser un desarrollador exitoso, cuyos juegos recibieron excelentes críticas, no solo en Paraguay, sino también en otros países del mundo, incluido Estados Unidos.

En los próximos días Escape Fast estará disponible para Android y Windows Phone. Los usuarios pueden obtener más información sobre el juego y los links de descarga en www.roshkastudios.com/escapefast/.

Hace poco más de un año, Corvalán, trabajando con la compañía Creadores, dio vida al videojuego Nick Wacky Racers 3D, que fue vendido a Nickelodeon, emblemático canal estadounidense dedicado al entretenimiento infantil desde hace más de tres décadas. El desarrollador, nacido en Asunción, está finalizando la carrera de Análisis de Sistemas en la Universidad Católica.

Potencial

En setiembre de este año, un grupo de entusiastas creativos conformó la Asociación de Desarrolladores de Videojuegos del Paraguay (IGDA PY). El objetivo es consolidar una industria local que promocione los trabajos, atraiga inversión y catapulte la creatividad nacional.

FUENTE: ÚH

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