Una mujer se crucifica frente a la embajada de Brasil

16 de diciembre de 2014

Una mujer se crucificó esta mañana frente a la embajada del Brasil en Asunción y se unió así a tres hombres clavados a un madero desde hace ocho días como protesta porque la entidad paraguayo-brasileña Itaipú, que construyó y administra esa usina hidroeléctrica, les adeuda beneficios sociales desde hace 25 años.

Compartir

"Rosa Cáceres tiene 52 años y es esposa de un extrabajador de Itaipú. Con mucho coraje se crucificó como solidaridad con nuestra causa", dijo Carlos González, líder de los exobreros de la Binacional. Los otros son Roberto González, de 61 años; Roque Samudio, de 58, y Gerardo Orué, de 49.

"Pedimos a los gobiernos de Brasil y Paraguay y a la misma administración de Itaipú el pago a unos 9.000 exobreros contratistas la suma de aproximadamente US$ 40.000 a cada uno por ayuda alimentaria, desarraigo, peligrosidad en el trabajo y antigüedad", agregó González.

Ningún portavoz paraguayo hizo comentarios de inmediato.

Los exempleados sostienen que según un acuerdo firmado en 1973 entre Paraguay y Brasil a los trabajadores les correspondían beneficios por alimentación, antigüedad laboral y productividad, ente otros; que sólo recibieron los obreros brasileños.

La hidroeléctrica, administrada por Brasil y Paraguay, se encuentra a unos 340 kilómetros al este de Asunción y posee 20 unidades generadoras con una capacidad cada una de 700 megavatios.

FUENTE: El nuevo Herald

Compartir

Más notas: