El EI gana entre uno y US$ 2 millones cada día vendiendo petróleo de refinerías y pozos que controla en el norte de Irak y Siria, según varias fuentes citadas por la cadena CNN. 

Otra fuente de ganancias son los secuestros. Una investigación realizada por "The New York Times" el año pasado reveló que Al Qaeda y sus afiliados, donde se originó el EI, había recibido US$ 125 millones en pago de rescates desde el 2008, incluidos US$ 66 millones en 2013.

El grupo islamista también controla a varios grupos de saqueadores de antigüedades y patrimonio histórico. A esto se suman impuestos recogidos entre la población y negocios en las amplias zonas ocupadas por el grupo y el robo. En junio pasado el Estado Islámico se apoderó en unos US$ 500 millones al saquear varios bancos en Mosul.

Esta semana el embajador iraquí ante la ONU, Mohamed Alhakim, acusó al EI de vender los órganos de sus víctimas, mostrando cadáveres con incisiones quirúrgicas hallados en fosas comunes. A algunos de los cuerpos les faltan los riñones, además de otros órganos.