Los restos de Rodrigo Vera de 25 años de edad, quien era bombero voluntario y guardia de seguridad, fueron encontrados por una mujer al costado de la ruta del kilómetro 30 de la ciudad, a unos 800 metros de su domicilio.
Según los intervinientes, el cuerpo presentaba rastros de sangre y raspones en la frente. En ese sentido, determinaron que la causa de muerte fue un traumatismo de cráneo severo.
Por su parte, la Policía Nacional sospecha que el hombre fue atropellado, sin embargo, sus camaradas dudan de la hipótesis, ya que aseguran que el cadáver no tenía golpes y por la distancia en donde fue encontrado debería de presentar otras lesiones.
Agentes de Criminalística y del Ministerio Público trabajan en el caso a fin de determinar exactamente como ocurrieron los hechos.