“Tuvimos unas 3.300 familias desplazadas de sus hogares por algunas horas, es decir 15.000 personas, hoy esa inundación súbita prácticamente desapareció y podemos acercarnos a la gente para brindar la asistencia”, indicó Saldivar 

Detalló que las zonas más afectadas fueron Capiatá, Remansito, y Yaguaron. En esta última localidad unas 150 familias sufrieron inundaciones en sus hogares, es decir 600 personas.

“Lo que contribuyó a la inundación fue la falta de mantenimiento de los canales de desagote, ya que cada tanto arrastran gran cantidad de sedimento y requieren un mantenimiento importante, además de los asentamientos instalados en zonas donde no deberían estar”, comentó.

Saldivar mencionó que hace falta un trabajo más de cerca con la población, “para informarles que se están asentando en zonas en donde no deberían hacerlo” y lograr un mayor involucramiento con las autoridades departamentales para que este tipo de situaciones no se vuelvan a repetir.

“La inundación hoy ya no hay pero deja el rastro de afectación y las necesidades sobre todo en casas que fueron arrastradas y que perdieron sus reservas de alimentación, las cuales vamos a estar proveyendo esta misma semana en todos los sitios afectados”, añadió finalmente.

Fuente: ip.gov.py