4 de agosto de 2015
Mientras una de las mujeres entretenía a las trabajadoras, la otra se encargaba de robar los perfumes.
Dos mujeres fingieron ser clientes de una farmacia y en el descuido de las empleadas introdujeron unos 14 frascos de perfumes en sus bolsones. El hecho ocurrió en la farmacia Kaneko en el 30 de julio pasado.
Mientras una de las mujeres entretenía a las trabajadoras, la otra se encargaba de robar los perfumes.