Los bebés, nacidos por cesárea a las 33,1 semanas de gestación, se encuentran estables pero requieren atención especial por su condición de prematuros. La madre ya tiene otro cuatro hijos y necesita colaboración.
Según la familia de la mujer, el padre de nombre Mauricio se enteró que tendría tres hijos más y decidió abandonarlos a su suerte. Apagó su celular y hasta el momento no se sabe nada sobre su paradero.